Los orígenes de la marca se remontan a 1923, cuando Antonio Santos Barral, padre del fundador de la empresa, José Santo Barral, fundó una pequeña carpintería cerca de Santiago de Compostela (España).
José Santos, rodeado de los primeros muebles de cocina producidos por su fábrica y de las herramientas de carpintería utilizadas por su familia durante generaciones, hizo hincapié en la profunda conexión de la empresa con la madera en un vídeo documental.
“Todos los antepasados de Santos eran descendientes de la madera», afirmó, subrayando el compromiso de la marca de adaptarse, crecer e internacionalizarse, manteniendo sus raíces y su conexión con el trabajo de la madera.
Santos prioriza la calidad de sus productos, garantizando que sus muebles y accesorios sean duraderos y resistentes. La marca se ha ganado una reputación por combinar diseño, calidad y confort en sus cocinas
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