El diseño de esta vivienda unifamiliar de una planta responde, en fondo y forma, al privilegiado contexto en el que se enmarca: un valle fluvial en el que la naturaleza, avivada por un clima templado húmedo, se muestra verde y frondosa durante todo el año.
Su estructura limpia y sencilla, alzada casi exclusivamente a partir de vidrio, madera y aluminio, busca trazar una conexión vívida entre el interior y el exterior. Los paramentos acristalados, que se prolongan hasta alcanzar la cubierta abovedada, propician una atmósfera luminosa y serena, en la que las vistas panorámicas invitan a olvidarse de los límites impuestos por la edificación para favorecer la inmersión total en el paisaje.